San Pablo. La falta de energía eléctrica en varias comunidades de los municipios de Malacatán, San Pablo, el Rodeo y parte del altiplano del municipio de Tajumulco, tiene molesto a la población.

 

 El corte de energía eléctrica se produjo el pasado sábado 8 de enero y según las autoridades de la Distribuidora de Energía de Occidente Sociedad Anónima DEOCSA de la transnacional Unión FENOSA es por una falla provocada por falta de mantenimiento de las líneas conductoras de energía.

 

Pero líderes comunales, sindicales así como el frente de resistencia en defensa de los recursos naturales y derechos de los pueblos, (FRENA), y del Frente Nacional de Lucha indican que el corte lo realizaron intencionalmente los personeros de DEOCSA.

 

El problema es que los comunicatorios que se encuentran sin el servicio de energía eléctrica no dejan ingresar al personal de la empresa Deocsa y amenazan con tomar medidas drásticas contra la distribuidora de energía.

 

Byron Hernández delegado de la Procuraduría de los Derechos Humanos de San Marcos se reunió con los líderes comunitarios y buscarle una solución pacífica al problema y que no existan enfrentamientos con las fuerzas de seguridad como sucedió a finales de 2009.

 

El auxiliar de la pdh solicito que se dé la re conexión del suministro de energía eléctrica, debido a que está provocando diversos problemas en estos lugares.

 

Además se informo que una comisión revisara el tendido eléctrico en conjunto con los líderes comunitarios y la presencia de técnicos de DEOCSA con apoyo de elementos de la policía nacional civil.

 

También se conformara una mesa de diálogo en el congreso de la república, en donde participaran representantes del ejecutivo, y las partes afectadas pero sin personal de la transnacional unión Fenosa.

 

De no lograrse estos acuerdos vecinos de la aldea El Porvenir del municipio de San Pablo amenazaron con Cerrar las compuertas del tanque de agua que alimenta la hidroeléctrica que abastece a los municipios de la región costa de San Marcos.

 

Las comunidades donde no hay energía, San Pablo se reportan 110, en Tajumulco 15, en San José El Rodeo 60 y en Malacatán son 80 y se puede extender hacia otros lugares de la zona cálida del departamento márquense.

 

El problema se origino en el 2002, cuando la población se empezó a quejar de los cobros exagerados de la empresa y que  no era lo que ellos consumían. De ahí algunos los líderes de las aldeas decidieron colocar la energía eléctrica de una forma directa, sin que pasara por el contador, acarreando millonaria perdida a la transnacional Unión FENOSA y como medida de presión hacia la población se producen los cortes colectivos de energía eléctrica.